ESSENTIA es mucho más que un restaurante. Se trata de un completísimo espacio donde además de una suculenta experiencia gastronómica en su restaurante, puedes acercarte a su gastrobar, con un ambiente más informal y relajado o, incluso celebrar un evento especial en sus salones o en su mágica carpa adyacente a un hermoso jardín.
El espacio se ubica en Tarancón, en la manchega provincia de Cuenca. Esta localidad es bien conocida por todos aquellos que realizan el trayecto comprendido entre la capital de España y la costa valenciana. Y es que, desde siempre ha sido un punto clave para hacer un alto en el camino y descansar.
Pero las cosas cambian y ahora ESSENTIA ha logrado que Tarancón pase de ser una localidad con el único fin de hacer una pausa en ruta para convertirse en un destino gastronómico por méritos propios.
Al llegar, te sorprenderá su colosal entrada. La barra del Gastrobar nos da la bienvenida. En él, la oferta es más informal que en el restaurante, pero siempre con el mejor producto y centrándose en sus raíces manchegas.
Nos relajamos y para comenzar la experiencia gastronómica ESSENTIA, abrimos boca con unos suculentos torreznos.
Tras el aperitivo y, antes de adentrarte en su universo gastronómico manchego, te aconsejo que des una vuelta y te deleites con los extraordinarios espacios con los que cuentan para todo tipo de celebraciones: bodas, comuniones, bautizos, así como eventos de empresa, etc
Ahora sí, nos dirigimos a la sala principal. Riansares está al frente del restaurante y nos recibe transmitiendo auténtica pasión y devoción por su trabajo. Y eso se nota. Y se transmite. En el espacio, cuidado hasta el mínimo detalle. En el servicio, exquisito y, por supuesto, en la calidad del producto, de matrícula de honor.
Comenzamos con un plato de jamón ibérico de bellota hipnótico.
Como referencia, decir que el proyecto parte de la ilusión y el sueño del empresario Emilio Loriente. Es el presidente de la empresa que provee los embutidos y jamones a Mercadona, Incarlopsa.
Y este sueño hecho realidad sigue su curso con más proyectos como la próxima apertura de un hotel adyacente al restaurante, salones y carpa para que, además, puedas alojarte en la localidad sin tener que volver a coger el coche tras una jornada de celebración.
Tras el jamón, degustamos un plato extraordinario: Ensalada de tomate de temporada con bonito del norte en AOVE, cebolleta tierna y piparras encurtidas. Hay que destacar sobremanera la extraordinaria calidad de producto de ESSENTIA. Encontrarás las mejores materias primas del mercado y tratadas con un mimo exquisito. Esta ensalada es absolutamente fascinante.
Siguiendo con esta máxima de la utilización de las mejores materias primas, te recomiendo encarecidamente que pruebes la Flor de Alcachofas de Tudela a la plancha con sal maldon y AOVE. Sí, cierto es que soy muy fan de las alcachofas. Pero no menos cierto es que estas puede que sean unas de las mejores que he probado en los últimos tiempos. Suaves, delicadas, tiernas y súper sabrosas ¡De 10!
Llegamos a uno de los momentos álgidos de esta experiencia gastronómica: la llegada de la chuleta.
El pasado mes de julio tuvo lugar en Londres el World Steak Challenge 2018. Se trata de un concurso a nivel internacional y de carácter anual en el que se elige la Mejor Carne de Vacuno del Mundo. El primer premio fue para un solomillo de carne de vaca finlandesa de raza Ayrshire, que distrubuye la empresa danesa JN Meat International.
El jurado puso en valor la carne presentada y la han catalogado de «extremadamente tierna y sabrosa, como un producto de calidad superior, caracterizado por un aroma y un sabor intensos, un marmoleado perfecto y una óptima consistencia de la grasa».
Y es que el punto diferenciador de esta carne es la alimentación de estas vacas finlandesas Ayrshire, criadas en libertad y alimentadas únicamente con pastos.
Así, ESSENTIA cuenta con su cámara de maduración propia, en la que alcanzan el mejor punto de los chuletones de vaca vieja finlandesa de raza Ayrshire
La carne de vaca vieja se ha convertido en el plato estrella de la casa. Y es que no todos los restaurantes pueden decir que sirven la mejor chuleta del mundo.
Como comentaba anteriormente, la cámara de maduración cárnica es uno de los espacios más preciados de ESSENTIA. En ella controlan constantemente la temperatura y la humedad para que la conservación de las piezas sea óptima. De esta manera logran «Revelar todo su potencial. El envejecimiento de la carne se consigue poco a poco y su textura se convierte en seda”. Estos procesos de maduración oscilan entre los 30 y los 60 días.
Las chuletas se preparan a la parrilla y las sirven con guarnición de pimientos de Lodosa y patatas fritas.
En ESSENTIA nos recuerdan que “servimos al año unos 1.200 chuletones -de lomo alto, la zona noble, junto a las costillas, la parte más jugosa- de esta carne. De cada pieza se consiguen entre nueve y diez chuletones”.
Pero, además de su venerada carne, también disfrutarás con la selección de elaboraciones de la tierra como la paletilla de cordero lechal, las chuletillas de cordero lechal, el cochinillo asado a la manera tradicional o pluma de cerdo ibérico a la brasa con patatas baby y pisto casero.
Y, si eres más de pescado, la excelsa calidad de ESSENTIA la encontrarás también en sus propuestas de la lonja. Ejemplo de ello es el taco de atún rojo salvaje a la plancha con verduritas salteadas con soja.
Llega la hora del postre y, he de decirte que tienes que dejar espacio para probarlos. Absolutamente delicados, deliciosos y, cómo no, caserísimos. La torrija caramelizada tiene una textura única. Para los muy queseros, no dejéis de probar su tarta de queso. Y los más golosos serán felices con el chocolate“Con una torrija caramelizada muy especial o una repostería casera que cuidamos mucho”.
ESSENTIA es, en definitiva, un completísimo espacio ideal para hacer una parada de camino a Valencia (o de vuelta). Óptima opción para una escapada familiar o de amigos. Así como para esa celebración especial y, por supuesto, extraordinario destino para un homenaje gastronómico en cualquier momento.
Calidad, mimo, cuidado de los detalles, y, sobre todo, pasión por las cosas bien hechas. ¡Enhorabuena, ESSENTIA!